¡Hola Compañeros!!! El invierno ya está dando sus últimos coletazos por esta temporada, y llega nuestra esperadísima primavera, ¡por fin la luz!!!, esta luz intensa, estos rayos interminables, este sol que ocupa todo el cielo e ilumina la tierra, se refleja en el mar y vuelve aún con más fuerza…

¡Se despierta la vida!!! Lo verde es aún más verde, los campos germinan de colores y nos abrazan, de los almendros y cerezos nacen las flores y crean los más hermosos cuadros vivos que se puedan ver y respirar…

La primavera, el renacer, el nuevo ciclo, el verdadero año nuevo comienza ahora…

Y por eso, porque nos quedan apenas cinco días para entrar en primavera, vamos a aprovechar para preparar un plato típico de invierno, ya que, a partir de ahora comenzaremos a consumir más las frutas y verduras que nos trae la nueva temporada…

La lombarda, también conocida por col lombarda, col morada o repollo morado, es «hermana» del repollo y ambos, como sabéis, son coles. Tenéis también en este blog una receta deliciosa de repollo macerado en salsa de ciruelas por si os apetece prepararlo uno de estos días. Volviendo a la lombarda, ésta es característica por su color violáceo o morado, dado por el pigmento llamado antocianina, que es un antioxidante ideal para la vista, el sistema inmunológico y el corazón.

Además, esta maravillosa col también posee ácido fólico, vitamina C, vitamina B3, zinc, es rica en fibra, betacarotenos y provitamina A.

Por otra parte por su contenido en glutamina se puede utilizar como un antiácido natural, ideal para tratar úlceras tanto de estómago como de duodeno. También es muy rica en calcio y potasio, como el repollo, y ampliamente utilizada en dietas de adelgazamiento por su bajo contenido en calorías y su poder saciante… ¿os he convencido?

Pues además de todo esto ¡está deliciosa!!! Y esta receta que a continuación os voy a enseñar, es muy fácil y rápida, ideal para una cena…

Ingredientes (para 4/6 personas):

• Aprox. 6 hojas de lombarda
• 1 buen chorro de aceite de oliva vírgen
• 4 dientes de ajo
• 1 manzana
• Aprox. 150 gramos de nueces peladas
• Aprox. 100 gramos de uvas pasas
• 2 cucharaditas de pimentón de la Vera
• 1 cucharadita de canela
• Sal marina integral al gusto
• Pimienta negra al gusto

Pues vamos a ponernos ya, que vamos a terminar en un «periquete» ya veréis qué rapidez. Lo primero, separamos unas 6 hojas enteras de la lombarda, procurad no cortar nunca por la mitad o a trozos. De esta manera, es decir, deshojándola, conseguiremos que se conserve mejor la parte restante que no utilizaremos en este momento, puesto que una lombarda nos va a dar para varios usos, sus hojas están muy prietas, es una verdura muy compacta, por lo que es muy prolífica y se puede conservar en perfectas condiciones durante semanas (en frío).

Ahora, vamos enrollando cada hoja sobre sí misma, haciendo un «rollito» lo más prieto posible y una vez que lo tengamos, comenzamos a cortar (con un cuchillo bien afilado) transversalmente y en trozos lo más finos posibles.

Así hacemos con todas las hojas hasta conseguir tener la cantidad total de lombarda en tiras muy finas y homogéneas.

Y una vez hecho esto, ya habéis terminado con más de la mitad del trabajo.

Es el momento de poner nuestro wok, sartén o incluso cacerola, al fuego con un buen chorro de aceite de oliva vírgen y los 4 dientes de ajo enteros y sin pelar. Simplemente los aplastáis ligeramente con un golpe, pues sólo queremos que el ajo vaya soltando su esencia, su sabor y sus aromas en el aceite, y posteriormente también se mezclen con nuestras tiras de lombarda…

Ponemos la potencia a fuego medio y permitimos que los dientes de ajo se doren un poco antes de añadir la lombarda…

Inmediatamente después, añadimos las tiras de lombarda directamente, sin necesidad de cocerlas o hacerlas al vapor primero unos minutos, como se prepara normalmente la lombarda…

Olvidaos de eso, gracias al corte muy fino de las tiras, lograremos que se cocine directamente en el wok y esto nos dará un sabor y una textura extraordinarias: sabor suavemente tostado, más intenso, a brasas y campo, en cuanto a textura, estará «al dente» y deliciosa… ¡Mmmmhhhh!!!!

Vamos removiendo y vamos sintiendo como se cocina, estará lista en 10 minutos como máximo. Al cabo de unos 5 minutos al fuego, añadís la sal, el pimentón, la pimienta negra y la canela… mezcláis y aprovecháis para cortar la manzana en trocitos.

En cuanto la tengáis bien troceada, la añadís junto con las nueces y las pasas…

Volvéis a mezclar, dejáis un par de minutos más en el wok, y ya tenéis vuestras tiras de lombarda listas para DISFRUTAR… Sí, disfrutar con mayúsculas, porque este plato os va a entusiasmar…. como siempre, lo más sencillo es lo más delicioso compañeros.

Por último retirad los dientes de ajo, servir y ¡a devorar!!!…. un consejo, para conseguir un maridaje perfecto mezclad con algunas hojas de rúcula…¡Impresionante!!!

Un abrazo enorme compañeros, ya me contaréis…

V&V