¡Hola compañeros!!! Estamos a un par de semanitas escasas del verano, aunque el calor ya pega pero bien… sobre todo en Madrid, que se convierte en una auténtica sauna, ¡puff!!!…
En fin, qué os voy a contar lectores «gatos»… lo mismo de cada año… esperando a que llegue el momento de poder escaparnos unos días del «foro» para «respirar» …
Eso me recuerda una anécdota muy divertida con un amigo de Bilbao, que se le ocurrió pasar una semana en Madrid a mediados de Julio… y me contaba que él cuando era pequeño y veía el telediario creía que los madrileños éramos tontos, pues cada año hablaban de atascos de tráfico de más de 100 km para salir de la ciudad, entre el 31 de Julio y el 1 de Agosto… y pensaba, «¿no se les habrá ocurrido esperar al menos hasta el día siguiente para marcharse?» … después de esa semana, me dijo que lo comprendía perfectamente… «en cuanto tenéis oportunidad salís corriendo todos a la vez, no me extraña, esto es insoportable»…
Bueno, pues todo esto venía para recordaros que ya se termina la primavera y por tanto la temporada de habas frescas. Así que aprovechad, porque además de ser un manjar, las habas frescas o tiernas, como legumbres que son, poseen una gran cantidad de proteínas, además de hidratos de carbono, hierro, magnesio y un porcentaje equilibrado de todas las vitaminas… Por si no fuera poco, su valor calórico es muy bajo, apenas aportan 40 calorías por cada 100 gramos… Y la sabia cultura popular nos dice que las habas renuevan la sangre, así que, un alimento verdaderamente completo…
Las podéis consumir crudas aliñadas, en ensalada, en un guisito con sus vainas o sencillamente salteadas, como os voy a contar aquí, mis preferidas….
Habitas tiernas encebolladas y salteadas con trocitos de tomate seco, que les aportarán ese intenso sabor a tomate y aroma de ahumado, banderillas (encurtido variado ensartado en un palillo con aceituna, cebolleta, pimiento rojo, guindilla verde y pepinillo) bien picaditas, el contrapunto sorprendente de vinagre y distintas texturas… y para finalizar unos copos de alga nori, una de las algas más ligeras y sabrosas para mi gusto, se utilizan principalmente en láminas para rollitos japoneses como el maki, pero tenéis que probarlas así, en este salteado…. ¡¡¡son exquisitas!!! También muy interesantes para preparar un arroz o pasta marinera, son tan ricas que yo me las como directamente de la bolsa, como si fueran pipas…
¿Os apetecen? Pues venga, seguidme que os cuento…
Ingredientes (para 2/3 personas):
- Aprox. 1 kg de habas frescas en su vaina
- 2 cebollas blancas dulces o cebolletas frescas
- 5 piezas de tomate seco
- 5 banderillas en vinagre
- 1 puñado de copos de alga nori
- 1 chorrito de aceite de oliva vírgen
- 1 puntito de sal marina
- 1/2 cucharadita de azúcar integral de caña o panela
Lo primero, primerísimo será pelar las habas, pero tranquilos, que no tardaréis mucho, además puede ser divertido si lo hacéis en compañía…
Aunque en principio os parezca mucha cantidad, ya veréis que al final se quedan en nada…
Id rompiendo los extremos y tirad de los «hilos» laterales hasta sacarlos del todo, después, las vainas se abrirán solas…
Una vez tengamos todas las habitas peladas…
Ya podemos empezar….
¡Ah! Por cierto, recordad poner los tomates secos en agua 1/2 hora antes de empezar a preparar el plato, necesitamos hidratarlos…
Y comenzamos vertiendo un chorrito de aceite de oliva en una sartén y la llevamos a calentar poniendo el fuego al mínimo, mientras tanto, pelamos y cortamos nuestras cebollas en juliana, para inmediatamente echarlas en la sartén y subir el fuego.
Añadimos un puntito mínimo de sal marina para ayudar a que la cebolla «sude» y se poche más rápido y 1/2 cucharadita de azúcar integral de caña o panela.
Pasados unos minutos…
La cebolla estará lista, bien pochada, tierna y doradita… en ese momento añadimos las habas…
Removemos y mezclamos bien, dejamos las habas con la cebolla un par de minutos mientras vamos escurriendo y troceando los tomates secos hidratados….
Mezclamos y añadimos las banderillas en vinagre muy picaditas, todos sus ingredientes cortados en trocitos muy pequeños….
Y finalmente, un puñado de copos de alga nori…
Mezclamos todo muy bien y permitimos que se cocine conjuntamente entre 5 y 8 minutos a fuego medio…
Importante, no añadáis nada de sal, simplemente con el mínimo punto de sal que hemos puesto anteriormente en la cebolla, el intenso sabor del tomate seco, los encurtidos y las algas, quedará perfecto…
Pues ya tenemos nuestras habitas tiernas, así de fácil y rápido… ¡¡¡ahora a disfrutar!!!
Un plato rápido, sencillo, lleno de nutrientes y absolutamente ¡¡D E L I C I O S O!!
Ya me contaréis….
Un abrazo enorme.
V&V